Desienbre 2021 Rebonborio
Torno a ser aquí, en mi setsión. Avonde si no.
Este darrero mes he tengudo más tiempo liure en el Aguacate Felís, más faena peró. Lo entenéis a esto, vosotros? Porque yo no. Han comensado a arribar bolsotes a demanarme si los alguacates que venemos tson traídos de etsplotasiones infantiles y no sé qué putas más.
Me demanan «De dónde traéis la soca?» Y yo les respongo «De mercapalma o de lagromar, suposo» y se me empreñan.
Os desía que tengo más tiempo y me puesto intennete a casa mía. “Trobarás moltas famellas” me diqueron. Y me he puesto un feirsbun. Que yo no sé qué cocones he feto que me he jodido en embolicos justo comensar. Me han hecho un poco el abuso también. Y en ves de charrar de setso con famellas, no aturo de barallarme con masclos que se gratan la pancha toto lo día. Me han arribado a desir que espeñaré el castellano de tanto habblarlo o no sé qué coconadas. No me sé avenir. Pocas faenas tienen, ya os lo dico ahora.
Ha hagudo de mostrarme las trescas mi cosina mentras baranábamos. Haora sé aferrar lencs y muestro el aplego de mis setsiones que me han feto los de la Mosca Metal. No vos lo vais a creer peró, he perdudo la contraseña. Esta me es buena. Dugo una setmana que no he pogudo abrir internette y por mí que me ne aflojo ya. Telefonaré a mi cosina, meamos.
Aquesto mes no vos afegiré más de mi cuento bruto porque me he empagueído y es que trobo que el nadal no son datas para charrar de porcadas. No voldría daros por los ojos, tampoco haora. Asín que si no vos ha de saber grabe, haurá de ser el mes prótsimo.
Voléis que vos cuente lo que sutseyó un disiembre? Cuando era bergante, mos anamos con los de la instrutsión allí a un tabbledans. Hasíamos una vuelta para ver famellas y nos topamos con un etstranquero o forastero, no me enrecuerdo masa, que mos dico que si volíamos ver mamas entrésmos. Yo nunca me hubiese imaquinado aquello. Famellas damunto las taulas con las mamas al aire y ballando que semblaba que habían de esbucar el puesto. Yo por aquel entonses duya una fortor que no me podía yeura de pancha, más fuerte que un maco de torrente. Y me había de penyar la yiqueta de los brasos porque enrabanaba que era un contento.
La questión es que como era un pollastreyo, no mos hemos de enganar, me empagueí no sabéis como. Y en querer partir, mos aturó un homanote que en la puerta de sortida, que mos quedamos estorados de lo groso que era. Como un ropero tenía las esquenas, y unos bravones que por mí que de una galtada mos tomaba los tres. Y mos dico «Qué vos habéis pensado? No podéis partir que no vos jodáis unas begudas». Recuarenta putastsagradas que mo hubimos de tornar endinso, y no sé que mos cobraron, eh? Que encara era en pesetas. Nos vieron la cara de bámbolos, peró.
Bé, lo haré corto que me enfilo. En sortir de allí, anábamos gatos como sopas y habíamos de manar cocho hasia casa. Y no mos pararía la polisía? A mí me tremolaban las camas y eso que anaba al costado del conduttor. Mira que venturosos fuimos, peró que no mos hisieron bufar ni nada. Pero la nerviada que agafamos no era de este mundo. Qué canosias que pasámos!
Refletsión: Si anáis embadalidos, os probarán de coder.